La rectificación viene precedida de un fuerte rechazo a la propuesta anterior de los socios de Gobierno, la oposición, sindicatos y asociaciones de trabajadores autónomos.
En su lugar se congelan las cuotas de los tramos inferiores y se plantea un incremento progresivo para tramos altos y medios.

El Ministerio de Seguridad Social ha rectificado su propuesta de aumento de cuotas para los autónomos en 2026, después de recibir un aluvión de críticas de grupos parlamentarios de izquierda, de derecha, organizaciones sindicales y asociaciones de autónomos.
En lugar de los incrementos drásticos planteados inicialmente, la nueva propuesta congela las cuotas de los tres primeros tramos (para quienes ganan hasta 1.166 euros mensuales) y establece subidas más moderadas para el resto, con incrementos entre 2,9 y 14,75 euros al mes, dependiendo de los ingresos.
A pesar del paso atrás, se siguen planteando, para el periodo 2026-2028, modificaciones que afectarán a los trabajadores autónomos y que incluirán:
- Cambios en el actual sistema de cotización por tramos con fuertes subidas de cuotas.
- Simplificación y mejora del sistema de prestación por cese de actividad.
- El establecimiento de un subsidio adicional para autónomos que agoten su prestación.
Esta medida afecta principalmente a los autónomos con rendimientos netos superiores a 1.167 euros, quienes verán un aumento en sus bases de cotización entre el 1% y el 2,5%. Las críticas han continuado, con sindicatos como UGT y CC OO considerando que la propuesta no mejora las pensiones de los autónomos, mientras que ATA, a favor de menores incrementos, también ha rechazado la nueva versión.
Cuál era la propuesta antes de la rectificación.
Se planteaba para 2026, un aumento en la recaudación de cerca de 15.000 millones de euros en cotizaciones de autónomos, 1.900 millones más que en 2025. Esta tendencia al alza continuaría en 2027 y 2028, con una previsión de ingresos de más de 18.700 millones anuales. En total, en los tres años posteriores a la implantación del nuevo modelo, la Seguridad Social ingresaría unos 5.739 millones de euros adicionales.
Desde ATA (Asociación de Trabajadores Autónomos) calificaron la propuesta como un verdadero “sablazo”, pues el aumento venía precedido de un fuerte incremento en las cotizaciones de hasta 1.200 millones de euros correspondientes a la primera fase de implantación del sistema de cotización por ingresos reales de 2023 a 2025.
La propuesta presentada por el Gobierno contemplaba subidas desde:
- 11 € más al mes para quienes ingresan entre 1.166 y 1.300 €/mes,
- hasta 206 € más al mes para autónomos con ingresos iguales o superiores a 6.000 € mensuales.
- Incluso los que menos ganan (670 € o menos) verían aumentada su cuota mensual en 17 €, pasando de pagar 200€ a 217€.
Cifras calculadas partiendo de la previsión de que el número de autónomos siga creciendo al ritmo observado entre 2023 y 2025.
Otros aspectos relevantes que están encima de la mesa de diálogo en la que se dirimirá el futuro de la Seguridad Social de los Autónomos serán:
- Mejora de la protección: se busca que la prestación por cese de actividad se convierta en una medida más efectiva que realmente respalde a los autónomos en períodos de crisis. En la situación actual, la prestación por cese de actividad, también conocida como «paro del autónomo», es un subsidio que estos trabajadores pueden solicitar en situaciones de cierre de actividad en incluso cuando atraviesen dificultades económicas, técnicas u organizativas
- Subsidio para mayores de 52 años: una de las principales demandas es la creación de un subsidio específico para los autónomos mayores de 52 años, que no puedan reincorporarse al mercado laboral una vez agotada su prestación por cese de actividad. Como bien han destacado asociaciones de autónomos, no tiene sentido la exclusión en la aplicación del subsidio basada, únicamente, en que el trabajo se realiza por cuenta y riesgo propio cuando concurre la misma situación de necesidad que en trabajadores por cuenta ajena.
Como conclusión:
La propuesta de subida de cuotas para 2026 no solo suponía un aumento significativo de la carga fiscal para el colectivo de autónomos; impactaba especialmente en quienes tienen menos ingresos y constituye el eslabón más débil del sistema. Para muchos, esta subida representa un coste difícil de asumir en un contexto económico incierto y con márgenes cada vez más estrechos.
Por eso, aunque el Gobierno defendió esta reforma como un paso hacia la equidad contributiva, la falta de consenso político y el rechazo de asociaciones y sectores clave evidenciaron la necesidad de una revisión profunda y una nueva propuesta del Ejecutivo menos ambiciosa en la recaudación como la que se ha producido.